martes, 26 de abril de 2016

Entre sueños y una cama de hospital

Entre sueños y una cama de hospital 



Mientras observaba el ir y venir de doctores, enfermeras residentes médicos, internistas y camilleros, en una sala de urgencias, en una espera eterna en busca de atención que no llegaba, después de esperar tanto, decidí dormir, decidí olvidar y dejarme llevar por un sueño profundo, ocultando en la obscuridad de mis ojos, todo lo que sucedía alrededor de mí, decidí no escuchar nada y bloquear cada sonido de esa sala de urgencias y perderme en el absoluto silencio de un sueño reparador de vida, de un sueño re constructor de actitudes tomadas, decidí ver los problemas como la oportunidad de encontrar soluciones, decidí ver en ese desierto en el que me encontraba como la oportunidad de encontrar un oasis, así como Jesús decidió deambular en el desierto para encontrar su destino, y ver en retrospectiva cada etapa de mi vida y hacer un balance a través de los años, y me convencí que todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora, tiempo de buscar y tiempo de desechar, descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superar los problemas, dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar, descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui.,

Me dejó de importar quién ganara o perdiera; ahora me importa simplemente saberme mejor cada día que viviera, Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, “el amor es una filosofía de vida”, dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente; aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás.

Decidí cambiar tantas cosas… aprendí que los sueños son solamente para hacerse realidad.

A veces nos ocurren cosas en nuestra vida que parecen desagradables, sin sentido sin plan y hasta nos parece que nos hundimos; pero si decidimos tener confianza en Dios, nos damos cuenta de que cada prueba, cada tribulación, es como una piedra arrojada sobre las quietas aguas de nuestra vida, que nos trae más cerca de nuestro objetivo.

Decidí elegir varios objetivos predominantes en mi vida, para conseguir que todas las circunstancias me inclinaran ante esos objetivos” Liberar mi corazón de odio, Liberarme mi mente de preocupaciones, Vivir sencillamente, Dar más y esperar menos.

Cuando pensamos en el mundo ideal…. Todo es armonía, felicidad y regocijo. No vemos más allá de lo que tenemos frente a nosotros, porque la vida así es buena, pero cuando descubrimos y observamos que dentro de ese mundo ideal hay para algunos momentos en los que no son tan gratos, pero que se deben enfrentar situaciones difíciles, retos que cumplir, tareas peligrosas y que más allá de las diferencias que vemos a nuestro alrededor y que nos tocó vivir.

Debemos aguantar vara y enfrentar con optimismo los retos, las tareas y las responsabilidades que se nos presentan siendo solidarios con el equipo, (familia) al que le tocó pertenecer y conformar para el logro de los objetivos.

Así es la vida misma, el enfrentar la vida como viene, como te toco vivirla, siempre con amor. (Alguien tiene que hacer el trabajo difícil) apechugar el corazón y mostrar de que estamos hechos (sacar desde el fondo de nuestro ser la misericordia, la bondad, la amistad, y la humildad) que dios te ha dotado para hacer de ti una mejor persona en beneficio de tu prójimo.

Dios creo así la vida, el destino de cada uno de nosotros esta pre-escrito, y tú y solo tu forjaran tu ser, tu mente, tu carácter y corazón, mediante las pruebas que dios te pone en el día a día.

El futuro pertenece a los que creen en la belleza de sus sueños.

Nunca dejes de creer en Dios y en los milagros que él hace. Sobre todo no menosprecies la oportunidad de ver cuando Dios te convierte en un milagro para otros.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario